Más de 200 asistentes entre presencial y online asistieron el 13 de junio a la VI Jornada Anual sobre Pro Bono 2024, organizada por la Fundación Pro Bono España y la Fundación Fernando Pombo. Un evento que se celebra simultáneamente por toda Europa para impulsar y dar a conocer el impacto social de proyectos pro bono de la abogacía. En nuestro país, el evento se centró en las personas con discapacidad.
Consistió en dos sesiones interactivas, en las que profesionales de la abogacía, la judicatura, el notariado y representantes de entidades sociales, junto con personas con discapacidad y sus familiares, compartieron preocupaciones y posibles mejoras en la aplicación de la Ley 8/2021. También, discutieron sobre los distintos modelos de colaboración que se pueden llevar a cabo desde la abogacía pro bono por la discapacidad.
PRESENTACIÓN DE PROYECTOS: EL PODER TRANSFORMADOR DEL PRO BONO EN LOS DERECHOS DE LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD
El acto fue inaugurado por Valentín García, socio de Cuatrecasas y vicepresidente del Patronato de la Fundación Pro Bono España, Manuel Martín, presidente de la Fundación Fernando Pombo, y José Luis de Castro, socio fundador y director de De Castro Estudio de Abogados y presidente del Patronato de la Fundación Pro Bono España.
Antonella Broglia, experta en innovación social y embajadora de Ashoka, condujo una sesión en la que las fundaciones organizadoras de la jornada presentaron cuatro proyectos pro bono centrados en el terreno de la discapacidad, con impacto tanto nacional como internacional. Las directoras de ambas fundaciones, Leire Larracoechea y Ana Higuera, destacaron que son muchas las necesidades que existen a pie de calle. Los proyectos, formaciones e iniciativas presentadas ilustran el potencial de la colaboración pro bono.
Los proyectos de la Fundación Fernando Pombo:
►Apoyo a la discapacidad en Asturias y Kenia: En este panel participaron Beltrán Tornos González cofundador y presidente de 4FATE, Laura García Reinoso, técnico paralegal de Procesal y Arbitraje en Gómez-Acebo & Pombo y tutora de proyectos de Clínica Jurídica, y Laura Atienza, responsable del Departamento de Asuntos Jurídicos y coordinadora de gestión de la Fundación Padre Vinjoy.
Se explicó cómo el asesoramiento jurídico y la formación especializada en discapacidad puede tener puentes y generar un impacto positivo en cualquier parte del mundo.
► La inclusión laboral de las personas con discapacidad en los despachos de abogados: En esta otra mesa participaron Fernando Bazán, socio y responsable global de laboral en Deloitte Legal, y Miguel Santiuste, técnico paralegal en Gómez-Acebo & Pombo y alumno del título universitario de Asistente Jurídico.
Miguel explicó cómo trabaja en equipo con abogados del despacho y cómo colabora pro bono con la Fundación Fernando Pombo. Además, Fernando Bazán invitó a toda la profesión legal a apostar por la captación de talento de personas con discapacidad en los despachos de abogados.Por su parte, la Fundación Pro Bono España presentó dos proyectos: El Desafío Pro Bono España y unas guías formativas, para las familias con niños con autismo y para las administraciones, sobre los derechos de los menores con autismo en actividades de ocio.
DIÁLOGO ENTRE EXPERTOS: RETOS SOBRE EL NUEVO RÉGIMEN JURÍDICO PARA EL APOYO A LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD, ¿QUÉ PODEMOS HACER DESDE LA ABOGACÍA PRO BONO, LA JUDICATURA Y EL NOTARIADO?
En la segunda parte de la jornada, Javier Luengo, director de Plena Inclusión Madrid, y Jorge Alonso (conocido en redes sociales como «Kocus»), vocal de Plena Inclusión Madrid, moderaron un debate entre representantes de la abogacía, la judicatura y el notariado en torno a las dificultades en la aplicación práctica de la Ley 8/2021 en ámbitos como las medidas de apoyo y las judiciales, la guarda de hecho, los procedimientos penales y otras casuísticas que afectan a la vida diaria de las personas con discapacidad.
Los expertos pusieron de relieve la necesidad de más información, formación y acompañamiento jurídico a personas con discapacidad, sus familiares y profesionales que les ayudan, de unificar criterios y de adaptarse a la realidad de cada persona.
En conclusión, la jornada fue un espacio de aprendizaje y reflexión sobre cómo el sector de la abogacía, y en particular, las fundaciones organizadoras, pueden generar redes de colaboración. Estas redes pueden servir para contribuir con soluciones jurídicas a retos importantes para avanzar hacia una sociedad más inclusiva.